Espero que el frío os haya cogido a resguardo y convenientemente abrigados.
Miren, lo primero que quiero dejar claro es que no me agradan los populismos, ni me agrada Donald Trump. Ni creo en él, ni en lo que defiende. No creo por higiene mental en nadie que diga que tiene soluciones sencillas para problemas complejos. Mucho menos, cuando se tienen soluciones para todo aquello que se promete en una campaña electoral, según se le van ocurriendo estupideces a cada candidato.
Tampoco me agradan sus maneras macarrónicas, la cosificación que hace de las personas en general, de las mujeres en particular y su exceso patológico de testosterona pistolera y fanfarrónica.
Pero acto seguido, voy a dejar clara otra cosa, antes de comenzar a entrar en el oscuro fondo de la cuestión. Trump, puede no agradarnos a muchas personas, pero la izquierda del mundo, ni tampoco la izquierda en España, puede salir en tromba a decir en los medios de comunicación que le dan bola, que la democracia se ha suicidado y generar un alarmismo que no veo aquí en España por cosas tan graves, como que mientras las energéticas se forran, los pobres se mueren de frío un invierno más y no hay Ley que les caliente. (puta hipocresía).
No es verdad. No hay ningún suicidio, pero la democracia, no es perfecta y tiene unos peajes. Poca memoria tienen algunos. Cuando las cosas no funcionan bien y se tuercen, aparecen sujetos como Adolf Hitler, o Benito Mussolini , "legitimados por el sistema" que hacen creer a la gente que "vienen a solucionarlo todo y/o a liberarlos". Sí, las gentes les votan y les dan el poder porque las gentes tienen hambre y dejan de pensar porque dejan de creer.
Populismos hay en cartera preparados y habrá más de seguir aquí empanados, chillando proclamas y tonterías inútiles.
El Presidente Donald Trump, ha salido elegido por sufragio universal y los EEUU poseen unos Organismos de Control que precisamente aquí, ni conocemos, además de los grupos de presión, (lobbys) perfectamente censados e identificados (aquí todavía no sabemos quién es quién).
Donald Trump, es el vencedor legítimo de unas elecciones habidas con unas garantías legales y jurídicas acordes con lo que denominamos democracia.
Donald Trump, es legalmente el nuevo presidente de los USA y según las leyes de ese País, es el Presidente de todos los norteamericanos.
Presidente de los que le votaron y los que no.
La izquierda y los políticamente correctos social-demócratas, ni pueden negarle a Trump su triunfo, propiciado por millones de votos libres colegiados, ni pueden aplaudir a los que dicen que no es su Presidente. Tampoco pueden ni deben montar allí, manifestaciones en las calles para protestar porque ha salido un candidato que no es de su agrado. Tampoco deberían insultar de cualquier manera posible, despectiva y vejatoria a los votantes de Trump que han ejercido libremente su derecho al voto.
¿Se consideran los opinadores de aquí y los incendiarios de allí, mejores personas y más capaces que los que han votado a Trump?
Puede que sí, ergo puro elitismo NO admitido.
¿Señores de la izquierda correcta políticamente, si actúan Uds. de esa manera que clase extraña de demócratas son Uds.?
¿De qué democracia están Uds. hablando entonces?
¿Qué narices defienden algun@s con su tertulia trilera?
¿No aceptan unos resultados electorales lícitos?
Perdonen, pero me suena a comunismo, chavismo, totalitarismo, elitismo, clasicismo, golpismo y a intolerancia. Si, a todo eso que Uds. con su verborrea políticamente correctísima, dicen combatir.
Los votantes estadounidenses, los del mundo entero, están hasta las barras y las estrellas de la política al uso que tiene mucha palabrería fina pero no crea empleo, ni mucho menos sube los salarios.
¿Entonces que han hecho los votantes?
Votar otra cosa de entre las ofertas posibles, decisión que es a priori muy inteligente.
¿Que buscan?
Buscan soluciones porque están desesperad@s ante la situación de crisis general que la vieja política ha creado y que hace ya unos quince años que venimos arrastrando en Occidente, puestos en manos de las Corporaciones y el Gran Capital.
Sí, en Europa también, en España más, peor y ocultado por el Sistema.
La vieja política no sabe resolver los problemas de la gente, el discurso se agota, el paradigma ha cambiado y algunos no se quieren enterar.
¿Que es un paradigma?
la RAE nos dice que paradigma:
1. m.Ejemplo o ejemplar.
2. m. Teoría o conjunto de teorías cuyo núcleo central se acepta sin cuestionar y que suministra la base y modelo para resolver problemas y avanzar en el conocimiento. El paradigma newtoniano.
El paradigma de pensar que lo correcto era la redistribución de la riqueza, la igualdad de sexos, la tolerancia, los Derechos Humanos, los derechos de las minorías étnicas y religiosas por decir algo, se ha ido a hacer puñetas en cuanto ha faltado comida en el plato y dinero para pagar el alquiler, la hipoteca o el colegio de los niños.
Entonces, viene la vieja política con sus viejas recetas a arreglarlo y no se arregla.
No se arregla porque la vieja política está totalmente podrida por dentro a derecha y a izquierda.
Ocurre que la social-democracia que es la izquierda posible y realista, no se ha dado cuenta de que sin cubrir las necesidades básicas de la pirámide de Maslow, el individuo busca sobrevivir y se la traen al pairo los moros, los negros, las putas, los enfermos, los viejos, los derechos humanos y la madre que parió a todo el rollo que se le mete de forma muy políticamente correcta en la sesera, pero que hoy por hoy es un discurso vacío que va directo a la precariedad, la frustración y el hambre.
Si además, quien dice que va luchar por los más desfavorecidos en los USA es la multimillonaria Hilary Clinton Inc, es como cuando aquí lo dice D. Felipe González. Credibilidad, ninguna.
¿Lo han entendido?
Mis lectores seguro que sí, los otros, no lo sé. En lugar de aportar soluciones, estarán protegiendo a alguna especie animal en minoría, lejos de casa, "sufriendo en la selva", que es muy cool y más políticamente correcto. Luego les entrevistará Jordi Évole y la "heroica" acción quedará validada.
Miren, o bien los actores cambian el final de la comedia política y se superan en su interpretación de las necesidades de la ciudadanía o el aumento de la desafección entre votantes y ciudadanos nos traerá populismos, extremismos y problemas sin fin. Pero lo que no se puede hacer, es no presentar opciones creíbles ni moralmente seductoras para el alivio de la desesperación de las gentes, echarle luego la culpa a los votantes y no acatar al Sistema, cuando el resultado, no agrada.
EEUU, ha sido una gran Nación, hasta hoy, porque tras su Guerra Civil siempre han permanecido unidos, esperemos que la gripe europea de la división y los nacionalismos no se les contagie.
En resumen, el artículo se podría haber llamado como el refrán: "Dame pan y dime tonto".
¿Lo entienden ahora?
¡Cojonudo entonces oyes!
Miren una cosa: "Cuando las barbas del vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar".
Y ya...